Mi relación con …

Tu y yo siempre tendremos un “algo más” muy especial.

Mis compañeros de la Universidad, blogs, internet, todos hablaban bien de ti, siempre bien.

Hace un año nos conocimos, no voy a mentir paso “algo más” ... ese “algo” que tu y yo sabemos y es complicado de explicar.

Después de muchas conversaciones, risas y buen rollo, acordamos una fecha para quedar, vernos y liberar endorfinas.



Antes de ese primer encuentro me dediqué en hacer bien las cosas para sorprenderte y hacerte feliz, pero el destino me sorprendió a mi ... no hice bien las cosas y no pude verte, estuvimos muy cerca, fui al punto de encuentro, te vi pero tú no a mí, no pude acercarme, me tuve que ir, no sabes lo que sufrí y lloré, pero el tiempo pasó, lo superé y la vida siguió su curso.

Pasaron los días, meses y a pesar de nuestra esporádica comunicación, cuando leo tus correos me doy cuenta que sientes lo mismo que yo, sin decírnoslo tenemos la certeza que las cosas hubiesen funcionado si nos hubiésemos dado la oportunidad porque hay química, existe ese “algo más”. En diciembre leí tu correo anunciando tu llegada, me quedé sin palabras, revolucionaste mi mente, mi mundo, mi todo.

Me duele que siempre estés allí para mí, qué afortunada soy, lo sé, pero el problema soy yo y no sabes cuánto lo siento. Soy yo la que no acude a la cita, soy yo la que te digo que voy a ir y siempre te fallo y este año no es la excepción.

Siempre he dicho que no creo en las casualidades, que en la vida las cosas pasan por algo, y sigo pensando lo mismo, el destino sigue manteniéndonos separados, razones tendrá, pero tú siempre allí, disponible para mí y yo cada vez más lejos y ahora más que nunca.



Este año te vuelvo a fallar mi Media Maratón de Latina, lo siento mucho, te prometo que esta historia no acaba aquí, veremos qué sucede el próximo año porque lo nuestro apenas empieza y no descansaré hasta que hablemos, dejemos las cosas claras y poder mirarte a los ojos y pedirte perdón.

Estamos conectados y lo sé, mientras te escribo estas líneas, recibo un mensaje tuyo, cambio de hora de nuestra cita...¿cómo te explico que este año vuelvo a fallarte?

Esta historia continuará...